Año 2021, tiempos aparentemente difíciles para programar unas jornadas de artesanía y salud, pero a la vez es un momento muy necesario para realizarlo. Tras el año 2020, tan duro para muchos, con tantos retos, superaciones, dificultades y del que hemos salido reforzados, estamos preparados y dispuestos para comenzar de nuevo con las jornadas de artesanía y salud.
Demasiado tiempo parece haber transcurrido desde nuestras últimas jornadas, pero echamos de menos esos momentos de encuentro, alegría, ganas de disfrutar y conectar con la naturaleza con la que venían en la mañana temprano nuestros asistentes. A primera hora, todo era tranquilo, y disfrutábamos de los primeros rayos del sol para comenzar la clase de yoga junto a la piscina.
Tras hora y media de yoga, hacíamos una parada para tomar té y frutas, mientras nos preparábamos para la clase de introducción a la alfarería. Algunos asistentes aprovechaban para hacerse fotos en el lugar aprovechando que había unas vistas impresionantes y la tarima junto a la piscina parece un balcón hacia la inmensidad.
Tras dos horas de clase de alfarería, disfrutar del contacto con el barro, aprender técnicas e intentar hacer cada uno su pieza a mano o en el torno, los resultados eran diversos, unos mejores y otros más comunes para principiantes.
Pero en lo que sí coincidían tod@s los que venían a vivir la experiencia, era en la sensación de bienestar, ligereza, disfrute y felicidad que estaban viviendo esa jornada.
Llegaba la hora del almuerzo, y los participantes, ya casi amigos ya que siempre había buen ambiente y nos llegábamos a conocer como casi «de toda la vida» en estas jornadas (se notaba la buena vibración), iban acercándose a la zona donde almorzaríamos con la deliciosa comida llena de colores, fresca y recién preparada que mi mujer Verónica prepara con su delicadeza y exquisitez.
Ella lleva casi una década dedicada profesionalmente a la elaboración de comida 100% vegetal, fresca y saludable, así que os aseguro que sabe bien lo que hace, y sabe bien cómo complacer a los comensales con mezclas de alimentos saludables que crearán una explosión de sabores y placer cuando lo comemos.
Especialmente el postre…
Las jornadas se van acabando, y tras el almuerzo dejamos algo de tiempo libre para disfrutar de la zona, la piscina, el sol, el silencio y la paz en la naturaleza o lo que cada uno quiera. Y cerramos la jornada con música, una puesta en común sobre la experiencia vivida y unos minutos de respiración consciente para terminar la jornada con las pilas cargadas y dando las gracias por tener la enorme suerte de formar parte de este proyecto y actividades que nos hacen sentir más humanos, y sobretodo más vivos.
Las siguientes jornadas de artesanía y salud están programadas para finales de marzo, os iremos avisando de la fecha concreta, horarios y precio en nuestra web y redes sociales muy pronto. Las actividades se harán realizando las medidas de seguridad e higiénicas oportunas para este tipo de actividad y acorde a las circunstancias actuales…
¿Te atreves a disfrutar de todo esto?
